domingo, 27 de octubre de 2019

Ambientes de aprendizaje


¡Buenos días!

En esta ultima entrada voy a hablar de los ambientes de aprendizaje. Voy a comentar qué es un ambiente de aprendizaje, los tipos que existen y sus características.

Para empezar, se va a ver qué es un ambiente de aprendizaje. Según Blández (1995),  los ambientes de aprendizaje en educación física son un espacio transformado utilizado para un fin determinado.  Hay que seleccionar el espacio y materiales adecuados para la temática .Se crea ambiente cuando se consigue que ese entorno sea atractivo y motivante para el aprendizaje de los niños.

Es decir, para hacer un ambiente de aprendizaje hay que  organizar el espacio y los materiales para construir un espacio favorecedor del aprendizaje. De esta manera puede surgir un aprendizaje espontáneo y positivo para el niño, dejándole ser protagonista de su propio aprendizaje. El maestro es el encargado de organizar y propiciar el aprendizaje, pero siempre desde un papel secundario.

Todo esto se puede relacionar con la "pedagogía de ambiente" de  Denis (1980).  Esta pedagogía dice que como los espacios y los materiales sugieren al niño ciertas acciones, el docente tiene que  presentar materiales y estructuras que respondan a los objetivos y contenidos marcados. 

En una sesión de ambientes de aprendizaje los niños juegan libremente sin que el maestro intervenga en algún momento, a excepción de que ocurra algún problema.
Las funciones del maestro tienen que ser las siguientes:

-Observar y organizar el ambiente de aprendizaje
-Observar los juegos que hacen los alumnos.
-Realizar anotaciones.
-Estar atento a que los alumnos cumplan las normas.

Los ambientes de aprendizaje se pueden clasificar en función de su origen, en función de su movilidad y en función de su participación.

Según su origen pueden ser:
-Naturales: Siempre están presentes.
-Organizados: creados para un fin determinado

Según su movilidad pueden ser:
-Fijos: no se pueden transportar.
-Semifijos: Con elementos difíciles de transportar.
-Móviles: transportables y manipulables.
-Mixtos: combinaciones de los anteriores.

Según su participación:
-Individualistas: participación individual.
-Socializantes: participación de varias personas.

Siguiendo a Blández (1995), el diseño de los ambientes de aprendizaje se relaciona con los bloques temáticos que se desarrollan en Educación Física y se llevarán a cabo de tres formas diferentes:

- Ambientes de aprendizaje diseñados hacia un bloque temático concreto.
- Ambientes de aprendizaje sin un bloque temático previamente marcado, pero determinándolo posteriormente mediante los resultados observados.
- Ambientes de aprendizaje con un carácter totalmente libre y no relacionado con algún bloque temático.

Para empezar a trabajar con ambientes de aprendizaje se recomienda utilizar la primera forma, orientando así los ambientes hacia un tema determinado.  Conforme se va cogiendo experiencia en este tema, se podrá llevar a cabo eficazmente las tres formas de los ambientes de aprendizaje.

Por otra parte hay que tener en cuenta el montaje de los ambientes de aprendizaje. Primero, es conveniente  montar el espacio antes de empezar la sesión, para no perder tiempo de clase. Para esto tiene que estar disponible el docente y el espacio, ya que si el maestro anteriormente tiene clase, o el espacio está ocupado puede ser un inconveniente. Además,  en algunas sesiones, puede ser difícil  debido a la gran cantidad y volumen de los materiales empleados.


Ana Belén Carmona Ortiz


Referencias bibliográficas:


Blández Ángel, J. (1995). La utilización del material y del espacio en educación física: Propuestas y recursos didácticos (1a ed.). Barcelona: Inde.

Denis, D. (1980). El cuerpo enseñado. Barcelona: Paidós.

Ríos. C. (2014). Los ambientes de aprendizaje y espacios de fantasía en la educación física. Escuela universitaria de magisterio, Zamora.

sábado, 26 de octubre de 2019

La Evaluación en Educación Física

¡Buenas tardes!

En esta última entrada voy a hablar sobre la evaluación de Educación Física en la etapa de Educación Infantil, ya que es un tema interesante que no se suele tratar con frecuencia.

En la etapa de Educación Infantil solemos encontrar dos perfiles de maestros muy distintos a la hora de evaluar la práctica de Educación Física. 
El primero es tradicional y dirigido. Realizan actividades más individuales que prácticamente carecen de factor social y están muy estructuradas.
Mientras que por otra parte, existe un estilo mucho menos dirigido en el que los maestros exponen las actividades directamente al grupo y están enfocadas a una realización más cooperativa y no estructurada. 

Como ocurre con el resto de áreas, en Educación Infantil, la evaluación debe ser global. Esto se refiere a que debe abarcar los cuatro dominios básicos: afectivo, social, cognitivo y motor, por lo que el fin de la evaluación global, es evaluar el proceso.

Por otra parte, también ha de ser continua y se ha de evaluar todo el proceso, como he mencionado en el párrafo anterior, tanto de forma global como individual.
También es imprescindible evaluar de manera formativa y detectar, si existieran, distintas posibilidades y dificultades de aprendizaje en los alumnos.

Gil (2004) señala que en esta etapa es necesario evaluar las relaciones que establecen los alumnos tanto entre iguales como con los docentes. Así como distintas actitudes, valores y normas que traten aspectos importantes relacionados con el desarrollo afectivo, cognitivo y social de los alumnos. Por último, es imprescindible, dentro de este área, evaluar el desarrollo motor y las conductas motrices en esta etapa.

Por otra parte, Aguirre (1996), apunta que en esta etapa, debemos evaluar a los alumnos, entre otras cosas, para:
  • Conocer el desarrollo neurológico y motriz del alumno.
  • Identificar el punto de partida de los alumnos.
  • Analizar distintas cualidades.
  • Hacer una valoración objetiva del proceso.
  • Modificar y reelaborar las actividades en función a la respuesta obtenida por los alumnos.
  • Valorar el trabajo realizado por el propio docente.
En Educación Infantil, la técnica principal de evaluación es la observación sistemática, aunque si necesitamos apuntar acontecimientos concretos, empleamos el registro anecdótico. Por otro lado, si lo que queremos valorar son contenidos relacionados con el desarrollo del lenguaje, podemos realizar entrevistas, aunque este tipo de técnicas se utilizan mucho más en la etapa de Educación Primaria. 
Si lo que queremos trabajar son contenidos específicos, se suelen emplear escalas de estimación o listas de control.

Actualmente existen técnicas alternativas de evaluación como la grabación en vídeo de las sesiones para recabar más información, o la toma de fotografías que tiene el mismo objetivo final que la grabación en vídeo. 
También existe la coevaluación entre los propios alumnos, y la evaluación de los alumnos al docente con el objetivo de que esté mejore la elaboración de sus actividades y pueda corregir posibles errores. Esta última técnica se lleva a cabo en Educación Primaria, en Educación infantil es muy compleja, pero en ocasiones pueden evaluar usando gomets, caras sonrientes o través de la expresión artística.


Laura Bernal - Murcia Mayor


Referencias

Ruiz, G. (2012). La evaluación de la Educación Física en la etapa Infantil: el papel del maestro como agente activo en la construcción de instrumentos. EmásF. Revista Digital de Educación Física. 17, pp. 24-36. Recuperado de https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/3991965.pdf


Gil, P. (2004). Evaluación de la Educación Física en Educación Infantil. Sevilla, España. Wanceulen. 




martes, 22 de octubre de 2019

Diferencia entre juego libre, dirigido y semidirigido.

¡Buenas tardes!
En esta última entrada hablaremos sobre los tres tipos de juego que existen. Veremos en qué consiste cada uno, los beneficios que tienen y cuál es, a mi parecer, el más recomendable para la etapa de Educación Infantil. Espero que, una semana más, sea de vuestro interés.

En primer lugar, definamos en qué consiste el juego libre. Muñoz (2009) lo define como la actividad que realiza un niño de forma individual o con sus compañeros, sin ningún tipo de instrucción y de forma espontánea. Es decir, en este tipo de juego, el niño decide cómo jugar, cuándo y con qué material o materiales lo hará.
Por otro lado, el juego dirigido es lo opuesto al juego libre. Mientras que en éste último el niño es el que toma toda las decisiones, en el caso del juego dirigido es el docente el que establece las normas de juego, cuándo se va a jugar y los materiales con los que se va a llevar a cabo. En este tipo de juego existen unos objetivos y contenidos previamente fijados por el docente y a conseguir por el alumno, es decir, existe una intencionalidad.

Finalmente, el tercer tipo de juego es el juego semidirigido. Este tipo de juego es una fusión de los dos anteriores. En este caso, el docente elige los materiales con los que se va a llevar a cabo el juego y el niño decide cómo va a jugar con ellos. En este caso no hay un gran protagonista ya que, tanto el docente como el alumno, intervienen en la toma de decisiones.


Teniendo en cuenta lo anterior, vamos a indicar los beneficios de cada uno de los tipos de juego anteriores.

* El juego libre permite al niño expresarse de forma natural y espontánea. Fomenta el desarrollo de la imaginación y, según Salgado (2017) mientras realiza juego libre, el niño desarrolla sus capacidades cognitivas, motrices y sociales. Además, con este tipo de juego, los niños se relacionan con el entorno que les rodea y aprenden a ser más autónomos y  tomar sus propias decisiones.

 * El juego dirigido también tiene bastantes beneficios. En primer lugar, permite al docente organizar previamente la sesión. En relación a esto, le da opción al docente de fijar unos objetivos previos y estructurar la sesión en torno a éstos, aportando una intencionalidad a las actividades. Además, se evita la falta de interés del niño, pues cuando se permite el juego libre en exceso, puede que el niño se aburra por falta de motivación.  (Merino, 2018).

*  El juego semiridigido, tal y como ha sido mencionado anteriormente, es una mezcla de los dos tipo de juego anteriores; por tanto, el juego semidirido incluye beneficios de ambos. Con el juego semidirigido el profesor fija una serie de límites y puede mantener el control de la sesión en todo momento. Por otro lado, da al niño libertad, aunque le limite el acceso a materiales, para jugar a lo que quiera, fomentando así el desarrollo de la creatividad (aunque en menor proporción que con el juego libre). Finalmente, el último beneficio a destacar es la organización de la sesión en torno a una meta fijada por el docente y por el alumnado. El docente fija los contenidos y los objetivos, mientras que el alumno establece cómo los quiere conseguir.

A mi parecer, los tres tipos de juego son necesarios en la etapa de Educación Infantil. Los tres aportan beneficios al niño y pueden ser utilizados por el docente para conseguir información y cumplir los contenidos establecidos en el currículo.
- Con el juego libre, el docente puede realizar una evaluación previa del nivel motor que tiene el aula y las deficiencias motrices concretas que pueda presentar algún alumno.
- Con el juego dirigido, conseguimos estructurar la sesión y podemos obtener el aprendizaje que pretendemos en nuestros alumnos.
- Con el juego semidirigido, el docente y el alumno fusionan sus objetivos y preferencias, favoreciendo la motivación del alumnado y la consecución de objetivos que pretende el docente al establecer los límites.

Por tanto, no podría decantarme por ninguno, pues todos son aptos y positivos para realizar en la etapa de Educación Infantil.


Referencias

Muñoz, J. (2009). Juego dirigido y juego libre en el área de Educación Física. Temas para la educación. Recuperado de https://www.feandalucia.ccoo.es/docu/p5sd5058.pdf

Salgado, A. (2017). Beneficios del juego libre para el desarrollo de los niños. Recuperado de
https://blog.segurossura.com.co/articulo/calidad-de-vida/beneficios-juego-libre-para-desarrollo-ninos

Merino, M. (2018, octubre 9). Beneficios del juego dirigido. Ok diario. Recuperado de  https://okdiario.com/bebes/beneficios-juego-dirigido-3210723


Sandra Gómez Gómez




sábado, 19 de octubre de 2019

El juego motor

¡Buenas tardes!

En esta entrada voy a hablar sobre un recurso muy utilizado en Educación Física en la etapa de Educación Infantil, el juego motor.

Al hablar del término "juego", nos solemos referir a una actividad lúdica. Tanto la palabra juego, como la palabra lúdico provienen del latín, y ambas tienen un significado similar: diversión. Por tanto, una de las características esenciales del juego, es que posea un componente divertido.

Según Huizinga (1938), el juego es una acción voluntaria que se realiza siguiendo unas normas establecidas en el espacio y en el tiempo, que siguen un objetivo concreto y que se relacionan con los sentimientos de los alumnos. Sigue unas características determinadas:

  • Es libre para los alumnos, hacen lo que les apetece y como les apetece en ese momento sin prácticamente ninguna norma o limitación.
  • Tiene unas reglas aunque sean mínimas.
  • Se delimita por un espacio y un tiempo establecido previamente.
En cambio, Navarro (1993), lo define como "una actividad recreativa natural de incertidumbre sometida a un contexto sociocultural", y propone otras características distintas a las de Huizinga:
  • Es recreativa, ya que tiene como fin el entretenimiento.
  • Debe ser libre, natural y espontánea. 
  • Presenta una incertidumbre en la que los alumnos no saben lo que va a pasar en todo momento.
  • Está ubicado en un contexto sociocultural en el que hay presente un ambiente, una organización de grupos sociales...

Aunque en muchos casos se pueda llegar a pensar que los juegos solo poseen un componente divertido y su función principal es entretener, no debemos dejarnos llevar por esa idea, ya que el juego en esta etapa es algo muy serio que permite el desarrollo del niño y la formación de la personalidad como comentaba Ana Belén en una publicación anterior.

El juego motor es el resultado de una acción corporal condicionada por un proceso cognitivo y unas características personales. Por ejemplo, correr hacia un lado para pillar al compañero.
Según Ruiz y García (1959), los juegos motores poseen las siguientes características para alumnos de Educación Infantil:
  • Fomenta el desarrollo de la autonomía del alumno.
  • Mejora la capacidad de orientación en el espacio.
  • Fomenta el desarrollo de las habilidades motrices básicas de forma progresiva y consciente para el alumno.
  • Se sitúa en un contexto y, de este modo, adquiere un significado para el alumno, lo que le aporta motivación e interés por la actividad.
  • Permite descubrir nuevas sensaciones.
  • Ayuda al desarrollo de las habilidades sociales y de las relaciones entre iguales.

Para que una sesión de juego motor esté completa y cumpla los objetivos, debe tratar todos los contenidos básicos que se trabajan en Educación Infantil como: el esquema corporal, lanzamientos y recepciones, ATPE, desplazamientos, expresión corporal...
Pero, al mismo tiempo, debe cumplir los cuatro dominios que deben seguir todas las actividades de el área de Educación Física en esta etapa: dominio social, dominio cognitivo, dominio afectivo y dominio motor.

Aunque no se recoja como tal dentro de uno de los cuatro dominios, es imprescindible para los alumnos que el juego motor, al igual que la canción motriz y el cuento motor, estén situados en un contexto conocido por el niño y, que se establezca una relación coherente entre los contenidos, los objetivos y la actividad.


Referencias

Moreno, J. A. y Rodríguez, P. L. (s.f). El aprendizaje por el juego motriz en la etapa de Infantil. UNIVEFD. pp. 80-83. Recuperado de https://www.um.es/univefd/juegoinf.pdf

Ureña, N. (s.f). Los juegos y su aplicación práctica. pp. 2-8. Recuperado de https://www.um.es/desarrollopsicomotor/Nuria_002_files/005.pdf







El juego dramático en Educación Infantil

¡Buenos días!

Esta semana quiero comentar los beneficios que tiene realizar juego dramático en educación física con alumnos de Educación Infantil.  Mostraré qué es exactamente el juego dramático, sus características, funciones y los diferentes tipos que hay.

Para empezar, como dice Cervera ( 1991), el juego dramático es la actividad lúdica en la que los niños realizan de forma colectiva reproducciones de acciones que le son conocidas. Estas acciones las convierten en la trama del juego.

Según Mantovani (1993), el juego dramático es una forma de dramatización, que incluye el juego espontáneo y el adulto se encarga de coordinar y guiar a los niños. Los alumnos son quienes crean, inventan e improvisan a partir de varios temas y personajes, elegidos según sus intereses.


Características:

- Existe interacción entre iguales, los cuales tienen una relación entre si y comparten ciertas experiencias.
- Los elementos se convierten en objetos simbólicos.
- Hay una trama ficticia.
- Durante el juego dramático se dan una serie de gestos, acciones y verbalizaciones los cuales surgen en un espacio y tiempo determinados. 
- Los juegos se realizan con mucha seriedad.
- Dentro de la actividad dramática se representan diferentes roles, personajes…
- La improvisación tiene gran importancia.
- El maestro debe actuar como un arbitro,  fijando las reglas y preparando el material. Además, organiza y distribuye los papeles y el espacio, actúa de apoyo del alumno y evalúa las acciones realizadas.

El objetivo principal de la dramatización en Infantil es favorecer el desarrollo integral del alumno.

 Morón (2011), dice que  las funciones que tiene el juego dramático son las siguientes:

- Asimilación de la realidad, ya que los alumnos mediante las representaciones reviven esa realidad.
- Preparación y superación de situaciones, contribuyendo así a su aceptación.
- Expresión de pensamientos y sentimientos.
- Utilizar la dramatización como un recurso con muchas posibilidades globalizadoras, incluyendo entre sus componentes:

  •    Expresión verbal
  •    Expresión corporal
  •    Expresión plástica 
  •    Expresión musical
  •    Expresión creativa


Clasificación de juegos dramáticos según Freudenreich (1979):


-Juego de actuación espontáneo: los niños lo realizan con independencia de los adultos. Los maestros no influyen  en los contenidos de este juego. Este juego dramático se puede comparar con un acompañante imaginario. Produce en el niño un refuerzo del comportamiento reflexivo, cognoscitivo y de la seguridad del yo.

-Juego de actuación dirigido: Los maestros lo planean y dirigen. El juego se puede ofrecer de dos formas: especificando el problema, el lugar, el tiempo y quienes lo realizan sin marcar un desenlace, o dando el inicio y el final de la historia.



En resumen, la dramatización en Educación Infantil, se realiza de forma espontánea sin finalidad aparente. En ella predomina el fluir de ideas y acciones desordenadas, por lo que no se puede planificar.  En Infantil se trabaja el juego simbólico, dónde el alumno protagoniza la historia. Además,  hay que tener en cuenta, que obligatoriamente se tiene que utilizar el lenguaje verbal, ya que si no, sería mimo.
El juego dramático es un amplio instrumento a través del cual podemos trabajar con los alumnos, ofreciendo una gran cantidad de posibilidades para su desarrollo.
Pienso que hay que plantearse la gran utilidad que tiene el juego dramático, sus beneficios y aportaciones y poner en práctica la dramatización con los alumnos de Infantil.



Ana Belén Carmona Ortiz


Referencias bibliográficas:

 -Morón, M. (2011). El juego dramático en educación infantil. Temas para la educación, vol. (12), 1-15. Recuperado de
https://www.feandalucia.ccoo.es/docu/p5sd7915.pdf

-Mantovaní, A. Ruano, G. Lazcano, M. J. y Ramiro, I. (1993). Dramatización. 2º ciclo de Educación Primaria (guía para el profesor). Madrid, España: Edelvives.

- Cervera, J. (1991). Cómo practicar la dramatización con niños de 4 a 14 años . Madrid: Ciencel-Kapelusz.

-Freudenreich. (1979). El juego de actuación dramática. Madrid: Interduc/ Schoroedel.

-Yuste, J. , Ureña, N. , López, J., y Pedrero, M. (2012). Educación física en Educación Infantil. Murcia.


martes, 15 de octubre de 2019

¿Es la relajación sinónimo de Vuelta a la calma?


¡Buenas tardes!
   La semana anterior expusimos la importancia de la vuelta a la calma tras la sesión de actividad física intensa. Esta semana hablaremos sobre la relajación, pues suelen confundirse ambos términos a pesar de no tener ni los mismos objetivos ni significar lo mismo. Explicaremos en qué consiste, la diferencia entre ambos conceptos y algunas técnicas que se utilizan para trabajar la relajación en el aula.  ¡Espero que sea de vuestro interés!
   Comencemos definiendo en qué consiste la relajación. Weinberg y Gould (1996) la definen como una herramienta que permite al ser humano controlar estados de ansiedad y activación. Atendiendo a esta definición, si la relajación es una herramienta como tal, debe tener ligados una serie de finalidades. Entre ellas cabe destacar:
-                - Mejorar la toma de conciencia del propio cuerpo, así como de sus segmentos corporales (Le Boulch, 1984).
-                 - Concienciar y consolidar la capacidad para la inhibición voluntaria del tono muscular (Le Boulch, 1984).
-                - Favorecer el control de la respiración (Castellano, 2011).
-                 - Reducir el gasto energético y controlar la afectividad y las emociones (Conde, 1997).
             - Recuperar al organismo tras un esfuerzo intenso (Molinero, 2010).
-          Facilitar el descanso del sistema nervioso permitiendo un mayor control sobre el mismo (Molinero, 2010).
              -  Lograr una mayor concentración mental (Lefèbure, 2003).
-            - Aumentar el bienestar físico, incrementando el tono muscular y desarrollando un mejor control sensoriomotor (Cautela y Groden, 1985).

Como podemos apreciar, el objetivo principal de la relajación es dar la posibilidad al individuo de conocer el propio cuerpo, sus segmentos y posibilidades, aportándole beneficios tales como: control de la respiración, control de las emociones, aumentar la concentración, etc. En cambio, el concepto de vuelta a la calma, se centra en reducir progresivamente el ritmo cardíaco a través de una serie de actividades. Su objetivo no está relacionado con el conocimiento del propio cuerpo ni con reducir el estrés o la ansiedad, sino con la vuelta al estado natural del cuerpo tras realizar ejercicio físico.
Por tanto, la principal diferencia que podríamos extraer entre ambos conceptos es que, mientras que la vuelta a la calma se realiza siempre tras una actividad física intensa, la relajación se puede realizar en cualquier momento, sin necesidad de una actividad física previa. Podríamos decir que la relajación es una de las herramientas que utiliza la vuelta a la calma para reducir ese ritmo cardíaco. Ambos conceptos estarían ligados en un contexto relativo a la actividad física, pero en ningún caso, significan lo mismo. 

   Una vez clarificada la diferencia entre ambos conceptos, cabe resaltar la importancia de la relajación en el aula de Educación Infantil y algunos métodos que se utilizan para trabajarla. A nivel educativo, Gómez, A. (2013) afirma que la relajación es un medio para mejorar el tono muscular, la organización del esquema corporal, la respiración y la adopción de posturas equilibradas. Dado que todo lo mencionado se corresponde con contenidos a trabajar en la etapa infantil, en muchos centros ya se incorpora la relajación en la rutina diaria.
   
   Finalmente, os mostraré algunas técnicas que se utilizan para trabajar la relajación en el aula:
-          Juegos de respiración.
·         ¡Soy un globo! Este mini juego consiste en hacer creer a los niños que son globos y deben inspirar tanto como puedan para, posteriormente, expirar y dejarse caer como globos deshinchados.
-          Sesión de yoga.
-          Masajes.
·         Acompañado de música relajante, proporcionamos a los niños una pluma para que masajeen a su compañero. Tras unos minutos o cuando percibamos que los niños comienzan a activarse, cambiamos el rol.

Existen otras muchas formas de trabajar la relajación en el aula, muchos juegos con diferentes temáticas y que suelen atraer bastante la atención de los niños. Sólo se necesita encontrar la técnica o técnicas que mejor funcionan con nuestro alumnado.

Referencias.
Gómez, A. (2013). La relajación en niños: principales métodos de aplicación. 24, 36-39. Doi: http://emasf.webcindario.com

Sandra Gómez Gómez

domingo, 13 de octubre de 2019

Recursos materiales en Educación Física

¡Buenas tardes!

Esta semana voy a hablar sobre los tipos de recursos que se emplean en Educación Física, ya que es algo imprescindible para la práctica pero que, en ocasiones, genera un poco de confusión.

Según Terry Orlick (1978), los niños, para desarrollar su personalidad y conseguir un aprendizaje mucho más significativos, necesitan investigar, manipular y crear. Por eso es fundamental brindarles materiales que les permitan realizar distintas actividades.

Los materiales didácticos se pueden definir como las estrategias que utiliza el maestro como apoyo de su labor docente. Deben cumplir algunas funciones básicas como:

  • Función motivadora: deben resultar motivadores para los alumnos, ya que es imprescindible que sean atractivos para los niños y capten su atención.
  • Función estructuradora: tienen que ser estructuradores de conocimientos y de la realidad que les rodea.
  • Función de enseñanza: es totalmente imprescindible que estén relacionados con los contenidos y objetivos de enseñanza.
  • Función facilitadora de aprendizaje: en el área de Educación Física, algunos aprendizajes no se pueden llevar a cabo sin la existencia de estos materiales, para ellos es fundamental adecuarlos a la actividad y etapa educativa con la que estamos trabajando y asegurarse de que cumplen las características necesarias para realizar esa actividad. 
  • Función de soporte al profesor:  deben ser un apoyo para el maestro es sus labores de docencia y servir para mejorar el proceso de aprendizaje, de evaluación...


Los materiales curriculares son aquellos elementos que son destinados específicamente para la práctica de Educación Física y por tanto, se emplean para desarrollar numerosas actividades motrices como son los lanzamientos, desplazamientos, recepciones... Entre ellos podemos encontrar los materiales específicos de Educación Física, y los que no forman parte de ese área.

En el primer grupo se ubican los materiales deportivos (balones de fútbol, raquetas...), los de coordinación general (túneles, cuerdas...), los de coordinación óculo-manual (pelotas, picas, bolos...), de ritmo (panderos), de los sentidos (paneles con texturas)...
En el segundo, por otro lado, se encuentran los que no han sido destinados para la actividad física como tal como los materiales de desecho que, aparentemente no tienen más vida útil, pero se pueden usar perfectamente en Educación Física, como periódicos, botellas...

Existen algunos criterios para seleccionar el material destinado a las clases de Educación Física:

  • Tienen que ser actuales ya que deben responder a las necesidades educativas actuales, así como a los principios pedagógicos y a los criterios vigentes en la ley.
  • Deben ser seguros para los niños y fáciles de manipular ateniendo a los factores de peso, forma, tamaño...
  • Tiene que ser neutro y no favorecer a actitudes sexistas.
  • Debe ser funcional y rentable.
  • Tienen que estar adaptados al desarrollo evolutivo del alumno, favoreciendo al desarrollo en todos los planos.

En la etapa de Educación Infantil, los materiales más empleados específicos para el área de Educación Física son: los aros, las picas, los sacos de arena, pelotas pequeñas, túneles, cuerdas...Pero además, los materiales de desecho son un gran recurso para trabajar con los alumnos de esta etapa, ya que además de fomentar el reciclaje, permite relacionar contenidos con otras áreas.

Laura Bernal - Murcia Mayor

Referencias

Sánchez, B. y Márquez, S. (2003). Estudio del aula de Educación Física: Análisis de los recursos materiales propios del área. Apunts de Educación Física y deportes. 72, pp. 49-54. Recuperado de https://gredos.usal.es/handle/10366/18329?show=full

Lucea, J. (1996). Los recursos y materiales didácticos en Educación Física. Apunts de Educación Física y deportes. 1 (43), pp. 42-52. Recuperado de https://www.raco.cat/index.php/ApuntsEFD/article/view/316542

Pere, J., Devis, J. y Peiró, C. (2008). Materiales curriculares: clasificación y uso en Educación Física. Pixel-Bit. Revista de medios y Educación. 33, pp. 183-197. Recuperado de 
https://idus.us.es/xmlui/handle/11441/22578